“Nuestro primer lanzamiento fue la primera cuchara fabricada cien por ciento en cartulina, sin laminados plásticos, con barreras antihumedad y anti grasa. Queríamos empezar por un producto masivo y reinventarlo de una forma más sustentable”, explica Pablo Garcia, Gerente de Desarrollo de Nuevos Negocios. Este producto fue bien por los consumidores argentinos que venían reclamando alternativas de menor impacto ambiental en comercios como heladerías. Esto queda claro al revisar algunos datos: mientras que la cuchara sustentable Biohz se degrada en un período de 12 a 18 meses, la opción de plástico puede tardar 400 años.
Los productos de la línea Biohz se caracterizan por aplicar la innovación para desarrollar alternativas de productos funcionales, disruptivos y accesibles, comprometidos en cuidar el ambiente. La respuesta del mercado local fue muy positiva. De hecho, en el último año, la empresa comercializó 40.000.000 de envases genéricos para productos gastronómicos. También vendieron 2.300.000 cucharas sustentables, que permitieron reemplazar 7 toneladas de productos plásticos. Su diferencial consiste en ofrecer una alternativa libre de plásticos, biodegradable y reciclable.